14 noviembre, 2015

Gato con nido

El felino de nuestra historia pensó tanto en los pájaros a lo largo de su vida que los convirtió en su razón para vivir. Los acechaba con sus ojos magnéticos desde cualquier escondite: camuflado entre las ramas, desde los puntos altos, en las sombras. Rara vez los atrapaba, pues era algo lerdo; tampoco necesitaba alimentarse con ellos; era un gato de casa, bien cuidado y nutrido.
Con los años, llegó a amarlos; abandonó el propósito ancestral de la cacería. Les agradaba contemplar la majestuosidad de su vuelo, los ornamentos que algunos lucían como si fuesen joyas, sus trinos melodiosos y originales. Así, fueron llenando su mente. Por fin, en sus últimos tiempos, surgió un nido sobre su cabeza.

Por los bordes construidos con finas ramas apenas sobresalen sus puntudas orejas. Se escucha el piar de las jóvenes aves. Nuestro gato se aprecia feliz. Es un gran espectáculo. 

No hay comentarios.:

 
hits Blogalaxia Top Blogs Chile